Perdon al projimo

La sanación de la relación con Dios nunca será autentica si no se sanan tambien las relaciones humanas.
El perdon cristiano consite en orar por el que hizo daño, aceptar que siga vivo, estar dispuesto a ayudarlo si me necesita, desear su bien, desear que sea santo y feliz.
Para perdonar en serio se debe querer perdonar, decidir salir de la situacion de bronca, angustia, resentimiento. Es importante precisar bien que es lo que nos ha ofendido y pedir la gracia de perdonar eso.
Pedir a Jesus su amor para con ese amor perdonar al agresor. Imaginarse el rostro del hermano que me lastimó, imaginar que lo tomo de la mano y le digo en voz alta: "Jesus yo perdono a (...) por (...) y rencunio a la bronca que ocupo mi corazon. Rencuncio a desear que sufra y pague por lo que me hizo. Lo declaro mi hermano y deseo que sea feliz y alcance la felicidad del cielo conmigo"
Luego paso al perdon directo: paso a imaginar el hermano y mirandolo a los ojos le digo en vos alta: "(...) por lo que me hiciste yo te perdono y te libero de tener que pagar por eso"
Finalmente imagino un abrazo tierno y feliz entre los dos, un abrazo que sana todos los desprecios, los olvidos, las heridas. Y tambien imagino a Cristo que nos abraza y nos llena con su amor, sellando este encuentro. Mientras tanto digo: " y con este perdon (...) no te exijo nada, ni pretendo obligarte a que me des tu amor"
Se puede terminar haciendo una oracion para que el otro crezca, sea mas santo y mas feliz.

(Sanar un amor herido. Victor M. Fernandez)